“El excremento del diablo”: cómo el precio del petróleo llegó a ser tan fundamental para la economía mundial

Read Time:7 Minute, 2 Second
Ilustración del momento en el que Edwin Drake logró hallar el petróleo.
El estadounidense Edwin Drake fue el primero que extrajo petróleo con éxito, en 1859. Hoy EE.UU. es el primer productor mundial de este combustible, gracias al "fracking".

Era el 27 de agosto de 1859 y se había enviado un mensaje crucial. El último patrocinador financiero del empresario Edwin Drake finalmente había perdido la paciencia: Paga tus deudas, ríndete y vuelve a casa, decía el mensaje.

Drake había estado intentando encontrar "aceite de roca", un aceite "crudo" sin refinar de color marrón que a veces burbujeaba cerca de la superficie en el oeste de Pensilvania.

Planeaba refinarlo para convertirlo en queroseno para lámparas, un sustituto del aceite de ballena, que cada vez era más caro.

También generaría subproductos menos útiles, como la gasolina, pero si no lograba vendérselo a nadie siempre podría tirarlo.

El mensaje había sido enviado, pero Drake aún no lo había recibido cuando su taladro perforó un depósito subterráneo lleno de petróleo crudo bajo presión. Desde 21 metros debajo de la superficie, el petróleo comenzó a brotar.

Las ballenas se habían salvado y el mundo estaba a punto de cambiar.

Realizate una Evaluación Financiera Personal.

https://webpfc.com/2020/07/13/evaluacion-financiera-personal/

Solo unos pocos kilómetros al sur y unos años más tarde, se vio una pista de lo que vendría.

Cuando se descubrió petróleo en Pithole City, Pensilvania, en 1864, "no había ni 50 habitantes a media docena de millas", según reportó el New York Times.

Pithole City en el apogeo de su breve auge petrolero, en 1865.
Pithole City en el apogeo de su breve auge petrolero, en 1865.

Un año más tarde, Pithole tenía al menos 10.000 habitantes, 50 hoteles, una de las oficinas de correos más concurridas del país, dos estaciones de telégrafos y docenas de burdeles.

Algunos hombres hicieron fortunas, pero una economía real es compleja y autosuficiente. Pithole no era ninguna de esas cosas, y solo un año después ya había desaparecido.

Su auge petrolero no duró, pero nuestra sed por el combustible creció y creció. La economía moderna está empapada de petróleo.

Es la fuente de más de un tercio de la energía mundial.

Eso es más que el carbón y más del doble que las fuentes de energía nuclear, hidroeléctrica y renovable combinadas.

El petróleo y el gas juntos proporcionan una cuarta parte de nuestra electricidad y la materia prima para la mayoría de los plásticos.

Luego está el transporte.

Edwin Drake se había preguntado quién compraría gasolina, pero el motor de combustión interna estaba a punto de darle la respuesta.

Desde automóviles hasta camiones, desde buques de carga hasta aviones a reacción, el combustible derivado del petróleo todavía nos sigue trasladando -a nosotros y a otros objetos-.

Un estacionamiento repleto de autos
La gasolina nació como un subproducto menos valioso del crudo, pero hoy mueve al mundo.

No es de extrañar que el precio del petróleo sea posiblemente el precio más importante del mundo.

En 1973, cuando algunos estados árabes declararon un embargo a las ventas a varias naciones ricas, los precios aumentaron de US$3 a US$12 por barril en solo seis meses.

Eso produjo una desaceleración mundial, y en Estados Unidos hubo recesiones luego de los aumentos de precios en 1978, 1990 y 2001.

Realizate una Evaluación Financiera Personal.

https://webpfc.com/2020/07/13/evaluacion-financiera-personal/

Algunos economistas incluso creen que los precios récord del petróleo jugaron un papel importante en la recesión mundial de 2008, que convencionalmente se atribuye únicamente a la crisis bancaria.

A medida que avanza el petróleo, también lo hace la economía.

Pero, ¿por qué nos volvimos tan terriblemente dependientes de este producto?

Un joven Winston Churchill.
Un joven Winston Churchill.

El magistral libro sobre la historia del petróleo de Daniel Yergin, 'The Prize" (El Premio), comienza con un dilema que enfrentó Winston Churchill.

Churchill había sido nombrado jefe de la Royal Navy (la Marina Real de Reino Unido) en 1911.

Una de las primeras decisiones que tuvo que tomar fue si el Imperio británico enfrentaría el desafío de una Alemania expansionista con nuevos acorazados propulsados por carbón galés, de origen seguro, o por petróleo de la lejana Persia (la actual Irán).

¿Por qué alguien confiaría en una fuente tan insegura? Porque los acorazados a petróleo aceleraban más rápidamente y mantenían una mayor velocidad, y además necesitaban menos hombres para lidiar con el combustible y tendrían más capacidad para armas y municiones.

El petróleo era simplemente un mejor combustible que el carbón.

La decisión de Churchill en abril de 1912 -que él mismo bautizó como una "zambullida fatídica"- reflejó la misma lógica que ha gobernado nuestra dependencia del petróleo, y moldeó la política global desde entonces.

Después de la decisión de Churchill, el Tesoro británico compró una participación mayoritaria en la Compañía de Petróleo Anglo-Persa, el antepasado de BP (originalmente British Petroleum).

Una huelga de petróleo en un campo de la Compañía de Petróleo Anglo-Persa en 1909.
Una huelga de petróleo en un campo de la Compañía de Petróleo Anglo-Persa en 1909.

En 1951, el gobierno de Irán nacionalizó la petrolera. "Es nuestra empresa", protestaron los británicos. "Es nuestro petróleo", respondieron los iraníes. El argumento se repetiría en todo el mundo durante las décadas posteriores.

A algunos países les fue muy bien. Arabia Saudita es una de las más ricas del planeta, gracias a sus grandes reservas de petróleo.

Su compañía petrolera estatal, Saudi Aramco, vale más que Apple, Google o Amazon.

Una de las sedes de Saudi Aramco
Saudi Aramco opera en 28 lugares alrededor del mundo y emplea a alrededor de 76.000 personas.

Aún así, nadie confundiría a Arabia Saudita con una economía compleja y sofisticada como la de Japón o Alemania. Quizás es un poco más como Pithole en una escala mayor.

En otros lugares, desde Irak hasta Irán, desde Venezuela hasta Nigeria, pocos países ricos en petróleo han prosperado gracias a este descubrimiento. Los economistas lo llaman la "maldición del petróleo".

Juan Pablo Pérez Alfonzo, ministro de Petróleo de Venezuela a principios de la década de 1960, tenía una descripción más vívida. "Es el excremento del diablo", declaró en 1975. "Nos estamos ahogando en el excremento del diablo".

¿Por qué es un problema tener mucho petróleo?

Exportarlo aumenta el valor de tu moneda, lo que puede hacer que todo lo que no sea petróleo sea prohibitivamente caro de producir en ese país.

Significa que puede ser difícil desarrollar industrias manufactureras o de servicios complejos.

Históricamente, muchos políticos han tratado de monopolizar el petróleo de su país para ellos y sus aliados. Las dictaduras no son infrecuentes. Hay dinero -para algunos- pero esas economías tienden a ser débiles y frágiles.

Esa es una razón por la que podríamos esperar que algo reemplace al petróleo. El cambio climático, obviamente, es otra.

Pero el petróleo hasta ahora se ha resistido obstinadamente a ceder a las baterías. Esto se debe a que las máquinas que se mueven deben llevar consigo su propia fuente de energía, y cuánto más ligeras, mejor.

Un kilogramo de gasolina almacena la misma cantidad de energía que 60 kg de baterías, y tiene la conveniente característica de desaparecer después de su uso. Las baterías vacías, por desgracia, son tan pesadas como las llenas.

Planta de baterías de Tesla
La compañía de automóviles eléctricos Tesla está desarrollando tecnología pionera en baterías.

Los autos eléctricos finalmente comienzan a abrirse paso. Los aviones jumbo eléctricos son un desafío más difícil.

Hubo un momento en el que parecía que el petróleo simplemente comenzaría a agotarse -se lo llamó "pico del petróleo"- lo que impulsó precios cada vez más altos y nos dio el ímpetu para avanzar hacia una economía limpia y renovable.

Pero de hecho, hoy el petróleo se descubre mucho más rápido de lo que se consume.

Esto se debe en parte al rápido crecimiento de la fracturación hidráulica, o "fracking", un proceso controvertido por el cual se bombea agua, arena y productos químicos bajo tierra a alta presión para liberar petróleo y gas.

Una plataforma de fracking en el campo petrolero de la Cuenca Pérmica en Texas
La Administración de Información Energética de EE.UU. estima que aproximadamente la mitad de la producción total de petróleo crudo del país proviene del "fracking".

El fracking se parece más a la fabricación que a la exploración y producción petrolera tradicional.

Está estandarizado, disfruta de ganancias rápidas de productividad y el proceso comienza y se detiene dependiendo de si el precio es correcto.

Muchos críticos han expresado temores sobre sus posibles consecuencias ambientales a largo plazo.

No obstante, la Cuenca Pérmica, sede de la industria del fracking estadounidense, ya produce más petróleo que los 14 miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), incluyendo a Arabia Saudita e Irak.

Parece que todavía nos estamos ahogando en el "excremento del diablo", y podríamos continuar así por algún tiempo.

Fuente: BBC Mundo.

Suscríbete para obtener acceso

Lee más contenido de este tipo suscribiéndote hoy mismo.

Happy
Happy
0 %
Sad
Sad
0 %
Excited
Excited
0 %
Sleepy
Sleepy
0 %
Angry
Angry
0 %
Surprise
Surprise
0 %

Average Rating

5 Star
0%
4 Star
0%
3 Star
0%
2 Star
0%
1 Star
0%

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Previous post ¿Cómo saber cuánto vale lo que no tiene precio?
Next post Gobierno somete presupuesto complementario por 17,200 millones de pesos
Close

Suscribete

We use cookies to personalise content and ads, to provide social media features and to analyse our traffic. We also share information about your use of our site with our social media, advertising and analytics partners.
Cookies settings
Accept
Privacy & Cookie policy
Privacy & Cookies policy
Cookie nameActive

Privacy Policy

What information do we collect?

We collect information from you when you register on our site or place an order. When ordering or registering on our site, as appropriate, you may be asked to enter your: name, e-mail address or mailing address.

What do we use your information for?

Any of the information we collect from you may be used in one of the following ways: To personalize your experience (your information helps us to better respond to your individual needs) To improve our website (we continually strive to improve our website offerings based on the information and feedback we receive from you) To improve customer service (your information helps us to more effectively respond to your customer service requests and support needs) To process transactions Your information, whether public or private, will not be sold, exchanged, transferred, or given to any other company for any reason whatsoever, without your consent, other than for the express purpose of delivering the purchased product or service requested. To administer a contest, promotion, survey or other site feature To send periodic emails The email address you provide for order processing, will only be used to send you information and updates pertaining to your order.

How do we protect your information?

We implement a variety of security measures to maintain the safety of your personal information when you place an order or enter, submit, or access your personal information. We offer the use of a secure server. All supplied sensitive/credit information is transmitted via Secure Socket Layer (SSL) technology and then encrypted into our Payment gateway providers database only to be accessible by those authorized with special access rights to such systems, and are required to?keep the information confidential. After a transaction, your private information (credit cards, social security numbers, financials, etc.) will not be kept on file for more than 60 days.

Do we use cookies?

Yes (Cookies are small files that a site or its service provider transfers to your computers hard drive through your Web browser (if you allow) that enables the sites or service providers systems to recognize your browser and capture and remember certain information We use cookies to help us remember and process the items in your shopping cart, understand and save your preferences for future visits, keep track of advertisements and compile aggregate data about site traffic and site interaction so that we can offer better site experiences and tools in the future. We may contract with third-party service providers to assist us in better understanding our site visitors. These service providers are not permitted to use the information collected on our behalf except to help us conduct and improve our business. If you prefer, you can choose to have your computer warn you each time a cookie is being sent, or you can choose to turn off all cookies via your browser settings. Like most websites, if you turn your cookies off, some of our services may not function properly. However, you can still place orders by contacting customer service. Google Analytics We use Google Analytics on our sites for anonymous reporting of site usage and for advertising on the site. If you would like to opt-out of Google Analytics monitoring your behaviour on our sites please use this link (https://tools.google.com/dlpage/gaoptout/)

Do we disclose any information to outside parties?

We do not sell, trade, or otherwise transfer to outside parties your personally identifiable information. This does not include trusted third parties who assist us in operating our website, conducting our business, or servicing you, so long as those parties agree to keep this information confidential. We may also release your information when we believe release is appropriate to comply with the law, enforce our site policies, or protect ours or others rights, property, or safety. However, non-personally identifiable visitor information may be provided to other parties for marketing, advertising, or other uses.

Registration

The minimum information we need to register you is your name, email address and a password. We will ask you more questions for different services, including sales promotions. Unless we say otherwise, you have to answer all the registration questions. We may also ask some other, voluntary questions during registration for certain services (for example, professional networks) so we can gain a clearer understanding of who you are. This also allows us to personalise services for you. To assist us in our marketing, in addition to the data that you provide to us if you register, we may also obtain data from trusted third parties to help us understand what you might be interested in. This ‘profiling’ information is produced from a variety of sources, including publicly available data (such as the electoral roll) or from sources such as surveys and polls where you have given your permission for your data to be shared. You can choose not to have such data shared with the Guardian from these sources by logging into your account and changing the settings in the privacy section. After you have registered, and with your permission, we may send you emails we think may interest you. Newsletters may be personalised based on what you have been reading on theguardian.com. At any time you can decide not to receive these emails and will be able to ‘unsubscribe’. Logging in using social networking credentials If you log-in to our sites using a Facebook log-in, you are granting permission to Facebook to share your user details with us. This will include your name, email address, date of birth and location which will then be used to form a Guardian identity. You can also use your picture from Facebook as part of your profile. This will also allow us and Facebook to share your, networks, user ID and any other information you choose to share according to your Facebook account settings. If you remove the Guardian app from your Facebook settings, we will no longer have access to this information. If you log-in to our sites using a Google log-in, you grant permission to Google to share your user details with us. This will include your name, email address, date of birth, sex and location which we will then use to form a Guardian identity. You may use your picture from Google as part of your profile. This also allows us to share your networks, user ID and any other information you choose to share according to your Google account settings. If you remove the Guardian from your Google settings, we will no longer have access to this information. If you log-in to our sites using a twitter log-in, we receive your avatar (the small picture that appears next to your tweets) and twitter username.

Children’s Online Privacy Protection Act Compliance

We are in compliance with the requirements of COPPA (Childrens Online Privacy Protection Act), we do not collect any information from anyone under 13 years of age. Our website, products and services are all directed to people who are at least 13 years old or older.

Updating your personal information

We offer a ‘My details’ page (also known as Dashboard), where you can update your personal information at any time, and change your marketing preferences. You can get to this page from most pages on the site – simply click on the ‘My details’ link at the top of the screen when you are signed in.

Online Privacy Policy Only

This online privacy policy applies only to information collected through our website and not to information collected offline.

Your Consent

By using our site, you consent to our privacy policy.

Changes to our Privacy Policy

If we decide to change our privacy policy, we will post those changes on this page.
Save settings
Cookies settings